viernes, 10 de agosto de 2012

España: Avanzando hacia "Chinemania" (Una mezcla entre China y Alemania)

Observo como cada vez más, las medidas que están tomando para salir de la crisis nos están conduciendo a una especie de país híbrido entre Alemania y China. Me explico:

- En el tema sanitario, ya han empezado a quitarle a gente sus tarjetas sanitarias, así como a imponer medidas como que los inmigrantes abonen una cantidad anual por disfrutar de los mismos derechos de seguridad social que el resto de la población, amén del copago en las recetas. Poco a poco estas medidas se irán endureciendo, desapareciendo completamente la sanidad pública tal y como la conocemos (si todo sigue así, tened por seguro que esto va a suceder) En resumen, se va a pasar a un sistema privado de sanidad. Es una especie de americanización del sistema, o alemanización si quereis. Por tanto, en cierto sentido, aspiramos a convertirnos en alemanes. 

- Se comenta que habrá más bajadas de salarios para tratar de hacernos más competitivos vía precios. Antes que nada, apuntar que hay dos formas de competitividad, la competitividad vía precios y la competitividad estructural. La competitividad via precios consiste en reducir costes para así producir barato y reducir precios para ganar cuota de mercado. La competitividad estructural es algo más profundo, y consiste en conseguir ser más atractivos para el mercado, no necesariamente reduciendo precios. Se puede mejorar el proceso productivo, las características del producto, añadir valor añadido... Evidentemente, entre estas dos formas de competitividad, hay multitud de formas intermedias. 
En nuestro país nunca se ha apostado (o no como se debería) en ser más competitivos estructuralmente y ese es el problema. El problema no es de los "malvados especuladores" que hacen que la Bolsa baje. El problema es que las empresas españolas NO son competitivas. La solución a esto según el gobierno y Europa, pasa por reducir costes y abaratar exportaciones. Reducir costes por supuesto de los sueldos de los trabajadores claro. Esto está bien y es lógico económicamente (cosa que no han sabido explicar los políticos a la gente) hasta cierto punto. Si seguimos intentando reducir salarios para reducir precios, al final nos vamos a convertir en China. Productos ultrabaratos y salarios ridículos. Además esto debería generar deflación, pero con los precios del petróleo, este escenario está descartado a corto plazo, con lo que la gente cada vez tendría menos poder adquisitivo = menos consumo = más recesión = más paro y no quiero seguir. Por tanto en cierto sentido, aspiramos también a convertirnos en chinos. 

Pronto tendremos nuestra "Chinemania" si nadie lo remedia.  


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Coméntame tus opiniones